Ensayo

Precisamente, los sesentas, época en donde las palabras paz, amor y libertad se escuchaban por doquier. Donde los jóvenes luchaban por sus ideales y donde las autoridades eran vistas como barreras en contra de la libertad. Alrededor de todo el mundo hubo movimientos estudiantiles que alzaban la voz para exigir igualdades, para pedir libertad de expresión, por lo que en países como Checoslovaquia, Francia, Brasil, entre otros.

En México no se hizo esperar, y es que la represalia tomada por el exceso de autoridad de los cuerpos policíacos contra unas estudiantes fue la gota que derramo el vaso. De ahí surgieron varios movimientos estudiantiles en protesta contra excesos de una clase dirigente, una protesta contra el autoritarismo que dominaba en esa época al país. Este movimiento empezó alzando la voz en contra de las represiones del gobierno. El movimiento empezó a tomar fuerza para creer que se podía transformar al país. La ideología de los jóvenes estaba trascendiendo y haciendo conciencia en padres de familia y diferentes sectores oprimidos.

El resto es historia, una historia del que no podremos quizás nunca entender. Un hecho que dejó estupefactos a todo el mundo y que hizo dudar de la humanidad. Un hecho que dejo una huella que tal vez es una de las más marcadas a lo largo de la historia de nuestro país. Una huella que quizás nunca sabremos con certeza su contenido real y es que nunca hubo una información fidedigna y seguramente nunca la habrá. Ahora solo que a la imaginación y a la esperanza de que nuestras más grandes sospechas de lo acontecido y de sus repercusiones no sean del todo ciertas.

Hoy México a cambiado, ya no es un régimen autoritario, ya las represalias no son tan marcadas y se trata de manejar al país con más inteligencia. Se ha madurado a partir de los errores, a través de esfuerzos. México ya es una país mas libre y depende de nosotros que se mantenga así.